1911, Manuel Bando Ponce «Manolo Piriñal»
jueves, 6 de marzo de 2025Nace a las 11 de la mañana del día 5 de junio de 1911 en el nº 42 de la calle Castelar. Hijo de José Bando Moreno y de María Ponce Rodríguez, ambos naturales de Dos Hermanas. Por su padre de la familia de los “Piriñal” y por su madre de la de los “Ponces”. Son sus abuelos paternos Manuel Bando Castro y María Moreno García; abuelos maternos José Ponce López y Ana Rodríguez García, todos ellos naturales de la villa de Elvira y Estefanía Nazareno. Disfrutó en vida nuestro biografiado de una simpatía arrolladora entre todo el vecindario; decir “Piriñal el de la tienda” era la hilaridad, pues sus ocurrencias eran celebradas en los “tajos” agrícolas y en cualquier actividad laboral como los talleres de tonelerías y los almacenes del aderezo de la aceituna de mesa. Muy joven comienza a trabajar en el taller de tonelería de Pepe Torres, del callejón de las Tunas (hoy calle Dr. Caro Romero). Así se hizo oficial de tonelería, con el transcurso de los años. Su último trabajo como tal fue en la llamada “Huerta de Casanova” , con la entidad Guillermo Sierra Pickman.
El 17 de octubre de 1940, contrajo matrimonio con nuestra paisana la Srta. Carmen Varela González, la hija del “primito” el de la panadería. Aunque fue quinto de 1932 y le sirvió a la República, también fue movilizado por los nacionalistas y participó los tres años de nuestra guerra civil. Después de dejar los toneles, pone la primera tienda de comestibles en la calle Benavente, concretamente en el número 7, aunque años más tarde se establece con el mismo negocio en la calle San Sebastián 67(ahora Cristo de la VeraCruz). “Piriñal” era un bético de corazón y su presencia en el viejo estadio del “Betis obrero” campeón de liga, con un sombrero de paja era celebrada con hilaridad sana por esa formidable afición. Fue varias veces a los Sanfermines con la camiseta de su “Betis güeno”. Con Francisco Jiménez Arquellada “el Pata” fue a Milán a ver la eliminatoria del equipo de su alma, con su maillot y su sombrero de paja, causando admiración en el estadio milanés de San Siro. Cuando la Banda de Música de Dos Hermanas interpretaba el pasacalle con motivo de la Feria de Santiago, siempre hacía una parada delante de su casa y los componentes de la misma eran invitados a una copa de aguardiente y tortas de polvorón.
Así era “Manolo Piriñal”, derrochando siempre simpatía a todo el mundo. Como su negocio se componía de tienda y taberna, su esposa atendía los comestibles y él la taberna. Allí paraban obreros agrícolas, faeneros de los almacenes de aceitunas, albañiles, etc., y sus ocurrencias eran muy comentadas en todos los tajos. Quizás la más sonada fue taparle con ladrillos la puerta de su casa a Juanillo Peral, que se levantaba a las cinco de la mañana para trabajar como tonelero en el almacén de Carbonell y Compañía, y este al contar el hecho era, como se suele decir, “morirse de risa”, ya que tuvo que saltar por los corrales para salir de su casa y llegar a tiempo a su trabajo. También se le vio con su indumentaria habitual para acompañar a su “Betis güeno” en el Ramón de Carranza gaditano, animando al equipo de su alma.
El 19 de noviembre de 1969 fallece su esposa, lo que supuso un durísimo golpe para nuestro biografiado, del cual, aunque le sobrevivió 19 años, nunca se recuperó. Su carácter ya fue otro completamente distinto y falleció a la edad de 77 años el 27 de agosto de 1988. Nadie podrá olvidar sus ocurrencias y su sonrisa franca y llena de bondad.
Autor: José Sánchez Gutiérrez, publicada previamente en la Revista cultural de feria de Dos Hermanas.