1951, Antonio Sánchez Rodríguez «El Tato»
sábado, 6 de enero de 2024
Antonio Sánchez Rodríguez, en un desplante ante el novillo de Ceballos, el domingo 6 de mayo de 1951 en a Maestranza de Sevilla
Nace a la 1 de la madrugada del día 12 de Enero de 1928, en el número 36 de la calle Divina Pastora, de la entonces Villa de Dos Hermanas. Hijo de Fernando Sánchez Chacón y de Matilde Rodríguez Barbero. Sus abuelos paternos José Mª Sánchez Navarro y Mª del Carmen Chacón Martín, de Dos Hermanas. Los maternos Basilio Rodríguez Miranda y justa Barbero Núñez, naturales de Cantillana. Corta vida la de esta malograda figura nacional del arte de Curro Cuchares y Pedro Romero. Desde muy pequeño sintió la fiesta brava hasta lo más profundo de su corazón.
Vive con sus padres y hermanos en el “manchón” que explotan para subsistir en el Pago de El Tomillar. Antonio se hace un capote de cualquier cosa; con la rueda de una bicicleta se monta con unos cuernos del matadero; unas cornamentas que empuja uno de sus hermanos, se jalea él mismo y la “plaza”, la establece en una era cercana, siempre hay vueltas al ruedo con oreja y rabo. Antonio saluda al tercio con garbo y soltura. Es moreno y dobla en los naturales como el junco de la marisma con la brisa de la tarde. Por las noches hay escapadas a los cerrados de la Hacienda de la Indiana en el término rural de Utrera, de los Sres. de Conradi. Varias capeas con ganado deshecho de tienta y algunas novilladas sin picadores en su vida torera.
Es persona buena y noble con muchos admiradores dentro y fuera de Dos Hermanas. Con los 19 años ya padece de úlceras estomacales, ésto va retrasando su incorporación a fila. El domingo 6 de Mayo de 1951 debuta en la Real Maestranza de Sevilla, con novillos de los Hermanos Ceballos, bravos y nobles, que dieron buen juego en una corrida de noveles patrocinada por el diario “Sevilla”, actuando con Germán Molina (de Triana). Manuel Moreno (de Alcalá de Guadaira), Victoriano Jiménez Gitanillo (de la Macarena), José García Morillo (de San Bernardo) y Juan Gómez (de Coria del Río).
Después de una excelente faena, derrochando un valor excepcional con la muleta, no hubo suerte en la hora de la verdad y perdió la oreja que tenía ganada con toda justicia durante los tercios de la lidia. Luego torea en Dos Hermanas con el triunfador de esa novillada de Sevilla, el alcalareño Manuel Moreno “Pochocho”, Antonio, con un ganado bronco en extremo fue el triunfador de la tarde, mereciendo una vuelta al ruedo.
En Dos Hermanas, que se cumple éso de “profeta en su tierra”, aquella tarde mereció serlo. Sería la última vez que lo verían torear. Se fue a Figueras (Gerona), al Regimiento de Ingenieros Zapadores, a cumplir con el Ejército aunque con retraso, debido a su enfermedad.
Torea 3 veces en Figueras, una de ellas para los soldados de su Regimiento; pero su enfermedad ya no tiene espera y necesita la intervención; fue operado en el entonces Hospital del Generalísimo, el sábado 3 de Noviembre de 1951, el lunes 5 cuando se encontraba leyendo “El Ruedo”, se sintió muy mal y fue intervenido nuevamente con cáracter urgente, de momento superó la segunda intervención, pero el viernes 9 a las 13,45 de la tarde, fallecía de: Pancreatitis hemorrágica en peritonitis biliar. Sus restos descansan en el cementerio de Montjuic, de Barcelona. Así, con 23 años se nos fue Antonio Sánchez “El Tato”, como a él le gustaban que le llamasen en honor y recuerdo del gran torero de Alcalá del Río.
Más de una vez lo vimos dando un “capotazo”, en plena calle en la Tertulia Taurina de Casa Borujito en El Arenal, en las cálidas noches estivales y tras los ¡¡olés!!, su saludo al tercio imaginario pero lleno de fiebre torera.
Autor artículo y foto del archivo de: José Sánchez Gutiérrez, publicado en la Revista de Feria Cultural de Dos Hermanas.
